Reflexión personal sobre Yoga.

Lokah samastah sukhino bhavantu: Que todos los seres sean felices y prósperos.

 

El Ashtanga yoga hoy en día se ha popularizado, y el yoga más. Siento a veces que incluso existe mucho lío y confusión sobre qué es y para que se practica yoga.

En una sociedad actual donde lo queremos todo y lo queremos ya, el yoga viene a enseñarnos que desde ahí, no conseguiremos nada. En una sociedad de apariencias, practicar yoga se ha convertido en una moda, con un recorrido corto de usar y tirar. Me apunto a yoga y lo dejo, pruebo todas las shalas, me quedo con una, me cambio a otra, abandono, retomo, pruebo un estilo de yoga, luego otro. Pero tengo la foto, la ropa más molona, la esterilla más cara y hasta la botella de agua especial.

“Practicamos” yoga si, ¿pero esto es yoga?, claramente no. La práctica de yoga es un trabajo regular, constante y amoroso, de intimidad y confianza contigo mismo y con tu guía y compañeros de espacio. Es así cómo podrás conseguir evolucionar a un cuerpo y mente sano, a conectar con tu alma y llegar a la paz eterna, libertad y felicidad ilimitada. No hay un tiempo, solo hay que empezar y continuar. No hay un espacio ideal, cada cual debe encontrar el suyo propio. No hay un “estilo” de yoga mejor, solo debes descubrir cuál es el mejor para ti, que resuene contigo.

No hay maestro, solo guías, cada uno/a somos maestro de nosotros mismo. El guía (profesor) te ayudará o te dará las herramientas que en ese momento de tu vida necesitas para aprender a amarte, escucharte, respetarte y estar en paz.

 

Violeta.

 

padmasana playa