La práctica de yoga cambió mi vida, porque empecé a trabajar a través de las posturas asuntos propios, internos, emocionales. La práctica te hace investigar tu cuerpo, y en lo más profundo de tu alma, el trabajo de la respiración me produce mucha calma y en los momentos difíciles vividos el yoga ha sido mi liberación. El poder comunicar mis conocimientos y aprender de mis alumnos me transmite mucha felicidad.